
Para que lo comprobéis por vosotros mismos os he traído dos de mis álbumes de recortes de prensa donde recogía las noticias relacionadas con la droga… nadie me creyó entonces… tengo que hablar un momento con Danilo, mientras tanto id mirando las noticias y luego me podréis preguntar por las que queráis, Marta puede decíroslo, me las conozco todas… ¿A qué luego no me pilláis en un renuncio?
El Contador de Historias se levanta y sale por la puerta dejando a su más que receptiva audiencia en vilo, a la expectativa de llegar a comprender un mundo que no tendrá ninguna piedad con ellos. Esto sí que lo entienden y los jóvenes se abalanzan sobre los cuadernos ávidos de conocimiento. Algunos de los más mayores leen para los que aún no han aprendido y otros, con ansiedad infantil, miran las fotos de los casos boca abajo, todos quieren demostrarle su valía al Contador de Historias.
No cabe duda de que en estos días su opinión es muy respetada en el Núcleo, lo que vendría a significar que su opinión es de las más importantes del defenestrado mundo occidental en el que viven, antaño glorioso y que hoy muere. Pero en el pasado era distinto, mientras que occidente nadaba entre dinero digital, inexistente, y edificios sobrevalorados, el Contador de Historias no era más que Matías, un parias, un loco sin trabajo, superviviente forzado en una sociedad que entendía enferma. El tiempo le dio la razón y ahora Danilo, responsable de recursos del Núcleo, le da permiso para encender uno de los generadores y enseñar a los estudiantes la grabación de uno de los testimonios más sentidos y que más le marcaron para investigar lo que estaba pasando con la droga MDPV.
Llega a la habitación que usan de aula y después de cerrar la puerta y antes de que ninguno de los chicos pueda hablar, el Contador de Historias les dice:
Os he traído una declaración grabada con la siguiente historia, así que dejaremos las preguntas para más adelante, me gustaría que comprobarais la diferencia entre lo que veíamos los ciudadanos y lo que la prensa, en otras palabras, el sistema, nos contaba… entre los titulares que le dieron a la noticia, la mayoría fueron de este estilo… “Parecía una zombie” El sanitario superviviente relata el asesinato de su compañero a manos de V.J…. luego podréis buscarlo en el álbum… ahora escuchad por favor…
Quizá los capítulos deberían tener una unidad. Un principio y un fin. Porque lo que se lee no es una historia, es la introducción a una historia. ¿por qué intitularlo entonce Capitulo ttres?
Buenas Enrique, ante todo gracias por leernos.
Ya sabíamos que estos dos primeros capítulos titulados como El Contador de Historias (y sobre todo este último) podían llegar a crear la sensación de que no hay suficiente para un capítulo; pero lo que estamos intentando es mostrar la estructura que va a tener la serie (presente de los protagonistas-historias que cuenta el Contador). Además, aseguramos desde aquí que los próximos capítulos tendrán más contenido, y que irán ganando empaque.
Un saludo.